Cocinar a la plancha es uno de los métodos más saludables y recomendados por los nutricionistas por muchas razones: es una forma de cocina sana y sabrosa, reduce la ingesta de grasa y minimiza la pérdida de vitaminas y nutrientes.
Aunque cocinar con plancha de asar es muy fácil, siempre viene bien tener algún truco que mejore nuestros platos, como por ejemplo:
- Tener siempre la plancha bien limpia. Una plancha bien limpia evitará que se quemen restos anteriores de alimentos y que la comida sepa a otros alimentos.
- Cuidar la intensidad del fuego. Los alimentos más duros o más gruesos conviene cocinarlos a fuego más bajo o lento para que hagan también por dentro. En cambio los alimentos más finos o suaves hay que hacerlos con un fuego más alto o vivo para que queden con un sabor casi a parrilla.
- No cortar o pinchar el alimento. Si pinchamos o hacemos muchos cortes en el alimento para que se cocine más rápido nos podemos encontrar que pierda los jugos que contenga y quede muy seco. Un truco es ponerle unas gotitas de aceite (y el condimento que nos guste) directamente sobre el alimento y no sobre la plancha.
- Añadir la sal en el último momento. Con esto ayudaremos a que quede todo más jugoso.
- Es muy importante cortar las verduras bien finitas y que sean lo más frescas posibles para que queden bien jugosas. Las verduras más utilizadas suelen ser las alcachofas, espárragos, papas o patatas, calabacines, todo tipo de setas u hongos, pimientos, etc. La verdad es que prácticamente todas quedan muy ricas a la plancha. Intentad siempre que queden al «dente». Probad también a cocinar a la plancha las proteínas vegetales como el Tofu y el Seitán o gluten ya que quedan muy ricas.
Esperamos que estos prácticos trucos os hayan sido de utilidad. Y si sois de los que todavía no tenéis plancha o tenéis que renovar la actual, no os perdáis esta oportunidad. Plancha de asar con 2000 W de pontencia por sólo 15.90 €.